En relación con las noticias aparecidas en prensa sobre la reciente reunión en Santiago de Compostela del Consejo General de Hermandades y Cofradías Penitenciales de Santiago (“Fraternidad de Santiago”) y sobre su propósito de promocionar la celebración del Año Santo de 2021 y los valores del Camino de Santiago, incluyendo así mismo el proyecto de celebrar en el año 2020 un Congreso de Cofradías, la presidencia de la Archicofradía Universal del Apóstol Santiago quiere aclarar a sus cofrades, Cofradías Agregadas, amigos y público en general que la referida Fraternidad no tiene nada que ver organizativamente con la Archicofradía Universal del Apóstol Santiago. Son entidades muy diferentes desde la propia formulación de sus fines estatutarios.
La Archicofradía es una entidad católica, dentro, pues, de las directrices de la jerarquía eclesiástica, y tiene por finalidad primordial fomentar el culto al Apóstol Santiago y la peregrinación cristiana a su sepulcro. Por su parte la Fraternidad de Santiago (“Cofradías y Hermandades Penitenciales de Santiago”), según puede leerse en sus estatutos “nace como una asociación cultural de interés económico, que congrega a corporaciones, asociaciones, y federaciones que utilicen los símbolos vinculados a la iconografía de Santiago…”.
El congreso que la Fraternidad de Santiago dice proyectar para el próximo año 2020 tampoco tiene nada que ver con el V Encuentro Mundial de Cofradías y Asociaciones del Camino de Santiago, que organiza la Archicofradía, con el objetivo fundamental de preparar y prepararnos para la celebración del Año Santo; tendrá lugar los días 6,7 y 8 de marzo de 2020, tal como viene realizándose en los años que preceden inmediatamente a las celebraciones del Jubileo Compostelano. De todas estas actuaciones seguirá dándose cuenta al público en general y, por supuesto, a nuestros cofrades y Cofradías Agregadas en todo el mundo.
Aclarados estos extremos, ha de quedar claro que, naturalmente, la Archicofradía del Apóstol Santiago no tiene nada que objetar al hecho de que otras entidades, desde ámbitos diferentes, se hagan también el propósito de promover los valores jacobeos, valores de neta radicación cristiana en los que la Archicofradía cree, de los que viene haciendo promoción y, en la medida de sus posibilidades, cultiva.