Tras la Misa pontifical de la Solemnidad del Apóstol Santiago del pasado jueves, la sacristía de la Iglesia de San Martín Pinario acogió una breve ceremonia en la que Arzobispo de Santiago, Monseñor Julián Barrio y el Deán de la Catedral, Don Segundo Pérez, recibieron la donación de una cruz para la Basílica compostelana. Los donantes fueron los miembros de la Cofradía de los Griegos Hermanos del Tau, que tras peregrinar por el camino francés llegaron a Santiago para hacer entrega de esta preciosa pieza de orfebrería.
Los integrantes de esta Cofradía, Athanasios Ravassis, Thomas Ratsanos, Aristophanes Ronstantatos y Olga Rolefa caminaron en memoria de su amigo Giuhannes Nazos a quien la muerte repentina le impidió cumplir su deseo de peregrinar a Santiago. “De todo corazón deseamos depositar esta cruz Tau como una ofrenda a la tumba del Apóstol Santiago y como voto y memoria de nuestro amigo fallecido” dijeron en el acto de entrega de la cruz añadiendo su deseo de que si “Su Reverencia lo tiene a bien, esta Cruz Tau brille junto a las demás ofrendas del tesoro de la Catedral”.
La cruz está formada por distintas piedras preciosas tales como ópalos, zafiros, esmeraldas, lapislázulis y perlas y tiene la forma de la cruz tau, una figura emblemática en forma de la letra griega T. Este símbolo es otro elemento compostelano que se puede ver en el Pórtico de la Gloria ya que el Santiago de parteluz porta un báculo con esta forma.